Las atracciones que ofrece el nuevo vestíbulo del Hospital Sant Joan de Déu a los centenares de pacientes que pasean por allí cada día son:

•     Recorrer por dentro el aparato digestivo. En el centro del vestíbulo se ha instalado un túnel de arcos de distintos colores que recrean el intestino y que se iluminan cuando el niño pasa por debajo.
•     ¿Cómo funciona el aparato circulatorio? En el techo, en uno de los extremos del vestíbulo hay una gran esfera roja de la que salen unos tubos que simulan las arterias. El niño puede regular la velocidad a la que circula la sangre, moviendo un volante
•     Enviar mensajes al cerebro. Una pantalla táctil permite a los niños escribir sus pensamientos, que inmediatamente aparecen escritos en un laberinto de leds luminosos que hay suspendidos en el techo. Es una de las atracciones que más gusta. Muchos niños lo utilizan para enviar mensajes de estima a familiares, profesionales del Hospital y amigos que les ayudan a vencer las enfermedades.
•     Mover el aparato locomotor. En un lateral del vestíbulo hay una cámara que capta el movimiento de los niños y lo refleja en un panel de leds que hay en una pared.
•     Respirar con los pulmones. En otro extremo del vestíbulo hay dos cilindros con bolas que quedan suspendidas en el aire, igual que las partículas de oxígeno en los pulmones,  cuando el niño pasa por ellos.

La instalación de juegos interactivos en el vestíbulo del Hospital ha sido inaugurada esta mañana por el presidente de Abertis, Salvador Alemany, y por el director gerente del Hospital, Manel del Castillo, y se enmarca en el programa de humanización impulsado por Sant Joan de Déu para reducir el impacto de hospitalización en los pequeños.